Por la aplicación de los derechos humanos a las personas privadas de libertad gravemente enfermas

Eneko Goia, Joseba Asiron, Gorka Urtaran, Julen Mendoza

Donostiako alkatea, Iruñeko alkatea, Gasteizko alkatea, Errenteriako alkatea


Los que suscribimos el presente escrito lo hacemos desde una firme convicción que compartimos: La defensa de todos los derechos humanos de todas las personas. Derechos de los que todas las personas somos titulares, también aquellas privadas de libertad.

Además, nos une a los cuatro alcaldes de diferente ideología el hecho circunstancial de contar en nuestros municipios con personas presas que se encuentran gravemente enfermas, o aquellas otras que ya han superado los 70 años de edad. Son estas circunstancias, y el hecho de que sus derechos no están siendo respetados, las que nos llevan, en ejercicio de nuestra responsabilidad y desde una óptica estrictamente humanitaria, a trasladar nuestra posición y a solicitar la excarcelación de estas personas, así como de cuantas otras se pudieran encontrar en la misma situación.

Cuatro son las razones que nos llevan a sostener esta posición: la primera, el respeto a la dignidad de las personas, incluida la de aquellas que se encuentran en una situación de privación de libertad. Creemos en una sociedad donde los poderes públicos sean los veladores del respeto a la dignidad humana de todas las personas, porque creemos que una sociedad que vulnera el principio máximo de la dignidad humana, es una sociedad quebrada en lo humano, y con enormes carencias democráticas. El mantenimiento en prisión de una persona gravemente enferma e incurable sin las debidas condiciones para el tratamiento de su enfermedad atenta contra la dignidad de esa persona.

La segunda de las razones reside en nuestra posición firmemente contraria a la aplicación de penas inhumanas, no solamente en su establecimiento o fijación, sino también en el devenir de su ejecución. La permanencia de una persona gravemente enferma e incurable en una situación de privación de libertad no solo supone romper el principio del respeto a la dignidad humana, sino también supone en muchos casos una doble pena sobre la persona, porque el sufrimiento, y por ende el castigo sobre esta persona privada de libertad crece exponencialmente en comparación con cualquier otra persona recluida.

La tercera, el estricto cumplimiento de la legalidad aplicable a estas situaciones, y que en estos casos no se está produciendo por consideraciones que exceden el ámbito de lo estrictamente jurídico.

Y por último, creemos que la denegación de la excarcelación de una persona presa gravemente enferma e incurable rompe el principio de la resocialización de la pena privativa de libertad. La memoria anual de la Fiscalía General del Estado de 1991 señalaba que en los supuestos de enfermedad grave e incurable “las penas privativas de libertad ya no pueden cumplir su fin primordial de procurar la reinserción social del penado”. Solo la función punitiva y de castigo de la pena puede explicar la presencia en prisión en situación de preagonía, carece de sentido orientar a la reinserción a quién solo hubiera de salir de prisión para agonizar y morir.

Dicho esto, este principio de resocialización adquiere todavía una mayor dimensión en una situación de construcción de la paz y de la convivencia en la sociedad vasca. Sin duda alguna, y desde una perspectiva política, porque ayuda a la consolidación de la paz y elimina sufrimiento innecesario que solo hace dificultar la construcción de una nueva sociedad. Pero también, y desde una perspectiva jurídica, porque han desaparecido las razones que la Administración del Estado pudiera entender de riesgo para la seguridad ciudadana, y porque el derecho no puede abstraerse de esa nueva realidad social, y se ha de interpretar de acuerdo a ella. Por tanto, no debiera existir impedimento político ni legal alguno para la excarcelación de las personas presas con enfermedades graves e incurables y aquellas que han cumplido los 70 años de edad.

Finalizamos manifestando nuestro firme compromiso por seguir trabajando no solamente por la defensa de todos los derechos humanos para todas las personas, sino también, por responder a ese anhelo de la sociedad de construir un nuevo escenario democrático, de paz y convivencia.

Tabakalera: cultura en construcción

La antigua Fábrica de Tabacos de San Sebastián renace de sus cenizas. Al igual que la propia historia de la ciudad, que supo y pudo resurgir de su devastación reinventándose hasta llegar a ser lo que es hoy, la que fue sede de una actividad industrial alberga el Centro Internacional de Cultura Contemporánea. Cinco palabras que ponen nombre y apellidos a todo un proyecto de enorme contenido y que engloban la apuesta que esta ciudad hace para convertirse en un referente cultural ante Europa y el mundo. Que esta apuesta sea una realidad y se ubique en San Sebastián nos debe llenar de orgullo.

21267885792_ab637484bc_zPorque Tabakalera ha pasado de ser un inmueble vacío con destino indefinido a ser un edificio que arquitectónicamente va a enamorar y cuyas salas y espacios albergan ya un entramado cultural sin par en Euskadi . Superando las dificultades del camino, ha dejado de ser un proyecto para ser ya un polo de atracción y generación de cultura, que aspira además a ser multiplicador para que lo que surja de la simbiosis de todos quienes se han embarcado en esta aventura sea más que la suma de las partes. Las diferentes entidades que se alojarán en sus dependencias (Zinemaldia, Etxepare Institutua, Euskal Filmategia, Kutxa….) unidas a las actividades de nueva creación ligadas a la cultura contemporánea, así como los proyectos y empresas ligados a la iniciativa privada componen todo un ecosistema concentrado en sus 26.000 metros cuadrados. Lo cual es toda una declaración de intenciones que componen un punto de partida más que solvente pero que auguran un futuro lleno de posibilidades a este centro.

A través de la atracción del talento y la creación, Tabakalera será un agente dinamizador y potenciador de la cultura, no ya de Donostia y de Gipuzkoa, sino que me atrevería a decir que de toda Europa. Sin falsas modestias ni arrogancias, existen pocos espacios en nuestro continente que aglutinen tantos metros dedicados a actividades culturales y que, al mismo tiempo, visualicen su futuro como un ensamblaje de iniciativas que se deben contaminar entre sí para alumbrar nuevos caminos que todavía no somos capaces siquiera de imaginar. Sin ansiedad, dándole tiempo para evolucionar y madurar. Es un proyecto que ve la luz con unas líneas definidas, pero que al mismo tiempo está en construcción. Estoy seguro que lo que veremos cuando abra sus puertas no será todo lo que contendrá en el futuro. A su vez, es un inmejorable escenario para la ciudad ante el reto de la Capitalidad Cultural Europea del año próximo.

Donostiarrak TabakaleranTabakalera es, al mismo tiempo, una extensión de la ciudad. Un nuevo espacio se abre al crear un entorno urbano de calidad para el disfrute en el corazón de Egia. Tanto el entorno y perímetro (el pasadizo elevado sobre las vías del tren, la plaza Nestor Basterretxea con acceso al propio centro, el engarce de su entrada principal con Cristina Enea…) así como las propias instalaciones de Tabakalera, (con elementos que van a conquistar al donostiarra y con un remate en forma de prisma acristalado con una vista de la ciudad que va a asombrarnos a todos…) constituyen un conjunto que va enriquecer y mejorar nuestra ciudad. Estoy seguro de que en breve Tabakalera va a formar parte de uno de los planes imprescindibles de los donostiarras y de quienes nos visiten.

Pronto veremos cómo los diferentes colectivos encuentran en este espacio sus necesidades satisfechas: los creadores dispondrán de espacios e infraestructuras para su actividad; los emprendedores encontrarán metros disponibles para llevar a cabo sus sueños; las familias dispondrán de salas para el disfrute en días de sol o de lluvia; los más exigentes, encontrarán actividades culturales fuera del mainstream... Un edificio que nos acerca a los modelos de centros polivalentes de los países nórdicos. De hecho, su éxito radicará en la búsqueda de un equilibrio que satisfaga a los colectivos más vanguardistas y creativos como a los públicos más populares.  

Tabakalera es, en definitiva, la plasmación de una apuesta. La apuesta por ensamblar bajo un mismo techo un concepto: Donostia como referente cultural. Y es que la cultura es capital en Donostia: capital humano y capital económico. Son cada vez más los elementos que en nuestra ciudad están engarzándose en torno a esta idea: la cultura es riqueza, en su sentido más amplio, y entendemos que su futuro pasa por reforzar ese elemento de referencia cultural de altura. Tabakalera despega. 

El móvil en la otra Donostia

El teléfono móvil, junto a la llaves de casa, es hoy en día un elemento indispensable cada vez que salimos de casa todas las mañanas. Con el móvil hacemos transacciones bancarias, hablamos con los tutores de nuestros hijos, mantenemos contacto permanente con familiares y amigos, y enviamos mensajes, fotos, vídeos y correos electrónicos de forma instantánea. Atrás quedaron los tiempos en que era una simple herramienta para hacer y recibir llamadas. Abundan los ejemplos de cómo esta herramienta ha facilitado nuestra vida cotidiana.

Estas navidades, sin ir más lejos, un grupo de señoras de Amara que me conocen desde que nací se me dirigieron en una cafetería para enseñarme unas fotos en su teléfono móvil.  Fotos en las que aparecía el mal estado de los adoquines de una de las principales calles de la ciudad, que provocó la caída y la rotura de un tobillo de una de ellas. Aquellas señoras tenían las fotos convenientemente guardadas en el teléfono, preparadas para hacerlas llegar en cualquier momento al responsable de solucionar el problema, que no es otro que el Ayuntamiento de Donostia.

DonostiaOnLa anécdota ilustra muy bien cómo las nuevas tecnologías nos ofrecen un sinfín de posibilidades para mejorar las formas de relación entre la ciudadanía y los representantes públicos, y el potencial que éstas tienen para favorecer una comunicación permanente, ágil y rápida de las necesidades y cuestiones a mejorar.

Dos ciudades globales como Boston y Nueva York supieron verlo antes que nadie, y fueron pioneras a la hora de implantar aplicaciones de móvil para hacer llegar quejas o avisos, relativas a pintadas, aceras o carreteras en mal estado, iluminación, papeleras sin reponer, acumulación de basuras, charcos, nieve, árboles a punto de caer, o semáforos que no funcionan. Lo hicieron  a través de una aplicación que podía descargarse a través de la plataforma de apple i-tunes.

En el caso de Nueva York, la aplicación surgió como una evolución lógica del famoso servicio telefónico de quejas 311, que recibió nada menos que 30 millones de llamadas entre 2003, año de su puesta en marcha, y 2006, siendo clave además para gestionar las consecuencias del famoso apagón. Bastantes años después, fue Zurich, una de las ciudades más limpias, eficientes y con mejores estándares de calidad de vida, la que puso en marcha una aplicación similar. Curiosamente, los suizos tenían dudas de fuera a funcionar en una ciudad tan modélica, pero en el primer mes recibió ya 900 avisos.

Posteriormente, numerosas ciudades se han ido sumando a este movimiento, implantando sistemas de este tipo. Euskadi, y en concreto Donostia, no pueden permanecer ajenos a los nuevos tiempos. Debemos abrir las puertas del Ayuntamiento, para que la ciudadanía, de manera activa y comprometida, pueda hacernos llegar a los gestores de lo público ideas, propuestas, iniciativas, sugerencias, quejas y peticiones. Fomentaremos así una ciudadanía activa, participativa y comprometida con su comunidad, sin las limitaciones de espacio y tiempo propias de los foros presenciales, por poner un ejemplo.

Un dispositivo cotidiana y popular como el teléfono móvil debe tenerse en cuenta en todas sus posibilidades y usos, si queremos una Donostia más implicada y dinámica. Queremos dar un paso más en este camino e invitar a todos los donostiarras a formar parte activa de la vida política, gestionando la ciudad de forma más eficaz, organizada y democrática.  Creemos que el móvil puede ser una herramienta vital para empoderar a la ciudadanía y fomentar una nueva cultura política basada en la colaboración permanente.

Los beneficios son evidentes. Se impulsaría la participación cívica y la concienciación social,  implicándonos a todos y todas en la relevancia de cuidar de la ciudad y de velar por el cuidado de lo público. Se fomentaría la relación del Ayuntamiento con muchos jóvenes, habituados al uso de nuevas tecnologías, y que de otro modo no se acercarían. Y se darían pasos en la línea de hacer una ciudad inteligente -la famosa Smart city-, no una ciudad dominada por la tecnología, ya que, tal y como  plantea la socióloga Saskia Sassen, se trata de urbanizar la tecnología, no de tecnologizar la ciudad.

Por todo ello, y con el objetivo de ir convirtiendo en realidad estas posibilidades, desde el PNV de Donostia hemos puesto en marcha la aplicación  Donostia ON, para establecer un canal de comunicación directo, en tiempo real, entre la calle y el Ayuntamiento. Una nueva herramienta para avanzar en el camino de esa Otra Donostia con la que soñamos la mayoría. Una ciudad más transparente y abierta, con un Ayuntamiento diligente y capaz de responder de forma eficaz y rápida a las demandas y peticiones de toda la ciudadanía, sea cual sea su ideología.

De momento, los donostiarras podrán a través de esta nueva aplicación gratuita hacernos llegar sus fotos, ideas y propuestas para mejorar la ciudad. Ideas que se sumarán a las más de 2.100 post-it llenas de aportaciones que hemos recibido en Ideiagunea. Muchas de ellas referentes a los pequeños detalles que hacen grande esta ciudad: la limpieza y el cuidado de las calles, el pintado y estado de las calzadas y aceras.DonostiaOn

Pequeñas cosas que se olvidan y pierden a veces en el maremágnum de programas y cifras del Consistorio, pero que son las que mejor resumen la esencia del servicio público en su día a día. Atender y cuidar los pequeños detalles es una de las claves para hacer atractiva Donostia. Hacer todas y todos, también con el móvil, una mejor Donostia. La otra Donostia. 

Hay otra forma de hacer Donostia

En más de una ocasión  he escuchado un proverbio chino que dice: “ ¡Que puedas no vivir tiempos interesantes! ”. Otros se refieren a ese proverbio como una maldición, y en ese caso lo que se desea al otro es, precisamente, que pueda vivir tiempos interesantes. Sea como fuere, proverbio o maldición, lo cierto es que para Donostia, este año 2015 se nos presenta como un año crucial.

Va ya para ocho años desde que la crisis económica que nos azota empezó a manifestar sus primeros síntomas. Ocho largos años en los que hemos ido viendo como las bases sobre las que se sustentaba nuestro modo de vida se tambaleaban. Muchas han sido las consecuencias negativas que este largo periodo ha generado en nuestra Ciudad, las más lacerante es la que se traduce en las altas tasas de desempleo que venimos registrando y que seguimos manteniendo. 2014 ha finalizado con 10.785 donostiarras  inscritos en Lanbide.

Dicen los que saben – aunque uno en ocasiones llega a dudar sobre si hay alguien que realmente sepa – que este año 2015 se presenta más sonriente. Ojalá sea cierto. En cualquier caso quedará un largo camino para llegar a un nuevo lugar que nos pueda ofrecer mejores escenarios que los actuales.

También dicen los que saben, y en esto si que creo que hay quien sabe,  que los periodos de crisis son periodos de transformación, de cambio. Son momentos en los que surgen nuevas oportunidades, nuevas bases sobre las que asentar el futuro. La historia de nuestra Ciudad así nos lo demuestra. Y no sólo eso, esa misma historia también nos demuestra que en esta Ciudad siempre han existido personas que han tenido iniciativa y capacidad para convertirla en un lugar prospero en el que merezca la pena vivir y disfrutar.

Hoy, a pesar de las dificultades, se abren  nuevas oportunidades ante nuestros ojos. Donostia y los donostiarras tenemos motivos para afrontar el futuro con posibilidades de éxito. Varias son las razones para ello:

POST IT 1.- El hecho de que finalmente el amplio rechazo de la sociedad vasca haya logrado que ETA abandone la violencia, nos ha liberado de uno de los mayores lastres  que hemos sufrido durante demasiados años. Un lastre que disuadía a quien quisiera visitarnos, pero que sobre todo tenía una muy negativa incidencia sobre nuestro desarrollo económico y social. Aunque la crisis no nos haya permitido disfrutar plenamente de la fuerza que ofrece ese nuevo escenario, ese cambio se nota, y mucho.

2.- La capacidad e impulso de quienes logran que Donostia resulte atractiva, desde la gastronomía, el ocio, el comercio o los eventos.

3.- El conocimiento que alberga nuestra Ciudad. Sede de cuatro Universidades, centros de investigación, empresas tecnológicas y empresas que prestan servicios avanzados a las industrias de nuestro territorio. A veces parece un tópico, pero lo cierto es que hoy contamos con la generación más formada de la historia de nuestra Ciudad y de nuestro País. Hay talento, y hay ganas de emprender.

4.- Las infraestructuras y manifestaciones culturales con las que cuenta Donostia. Las que existen y las que vienen en camino. A pesar de las dudas y contratiempos. No cabe duda de que si en algo resulta crucial este año que hemos iniciado hace pocas semanas lo será a la hora de dar respuesta a las expectativas generadas de cara a 2016. Sería imperdonable no saber aprovechar esta oportunidad.

Ser capaces de ver las oportunidades no implica sin embargo tener la capacidad de saber aprovecharlas. Existe otro factor, determinante, que es el de ser conscientes de que el entorno en el que nos movemos ha cambiado mucho en estos últimos tiempos, y lo hará más en el futuro. Vivimos en una  sociedad globalizada, en la que la escala es el mundo. Un mundo en el que debemos buscar nuestro lugar y en el que debemos ser capaces de competir. Y eso nos exige una mayor apertura de miras. Desde lo que somos, debemos ser capaces de abrirnos a nuevas formas de pensar, a nuevas ideas y a nuevas propuestas. Las posiciones dogmáticas, los complejos o el sectarismo son malos compañeros para este viaje.

Debemos ser capaces de colaborar. De tejer nuevas alianzas y complicidades. En primer lugar con quienes nos rodean, pero también con aquellas ciudades con las que deseamos compararnos y a las que queremos parecernos.

Y sobre todo, debemos ser capaces de colaborar también dentro de nuestra propia casa. Verbos como cooperar, ayudar, apoyar o facilitar deben formar parte fundamental de nuestro vocabulario en el futuro. Y en especial en el ayuntamiento.  Quien tiene una iniciativa, quien emprende, quien invierte, quien quiere montar una empresa o quien quiere generar prosperidad lo hace también para la Ciudad. De su éxito depende que la administración preste sus servicios o que una comunidad pueda seguir siendo solidaria con quien más lo necesita.

En este entorno tan cambiante y en ocasiones tan incierto necesitamos también una Ciudad  rica en valores, valores humanos que nos permitan  convivir y resistir sobre bases sólidas.

2015 se nos presenta como un año crucial para todos aquellos que pensamos que existe otra forma de hacer Donostia. Muchos donostiarras deseamos un cambio de raíz en la forma de hacer las cosas pero no basta con desearlo. Somos los ciudadanos  los que debemos superar  esta situación. Debemos tomar decisiones que afectaran al futuro de Donostia. A su economía, a su atractivo como ciudad o a la convivencia de todos sus ciudadanos.

Sí, hay otra forma de hacer Donostia y,  hoy,  es más necesaria que nunca.

¡Esto va de economía!

Arantza-tapia-eneko-goia-eaj-pnv-economia-ekonomia-donostia-san-sebastian1-710x484Le escuché esta exclamación a Andoni Aldekoa, Director delegado del Gabinete del Alcalde de Bilbao,  en el curso organizado por la oficina de estrategia de Donostia y Bilbao metropoli 30 a principios de septiembre en el palacio de Miramar.  El curso de verano en cuestión se denominaba «nueva gobernanza para la nueva ciudadanía» y en su exposición, Andoni nos expuso la visión estratégica de su Ciudad.

Desde que le escuché esa exclamación no he parado de darle vueltas a la idea, formulada en otros términos con ocasión de la celebración del Pleno sobre el estado de la Ciudad el pasado mes de octubre: ¿De qué va a vivir esta Ciudad en el futuro? Porque yo no tengo ninguna duda de que  esa es la principal pregunta a la que debemos tratar de dar respuesta en este momento.  Guiados por ese espíritu hemos hablado y reflexionado durante dos semanas en IDEIAgunea. Y lo hemos hecho con muchas personas. Personas que tratan hacer realidad sus proyectos en esta Ciudad.

Hemos visto diversas experiencias, analizado proyectos, conocido iniciativas, escuchado quejas…. Pero sobre todo hemos aprendido una lección fundamental: Esas personas, esos y esas donostiarras son el principal motor de la respuesta que buscamos como Ciudad. Y funcionan. Vaya si funcionan. Muchas veces a pesar del Ayuntamiento.

¿Por qué no nos ponemos todos a empujar en la misma dirección? Esa ha sido una de las recurrentes preguntas que ha sobrevolado todos nuestros encuentros. Porque no hay visión estratégica, contesto yo. ¡Cómo demonios vamos a empujar en la misma dirección si algunos no saben la dirección en la que hay que empujar! Ese es uno de los rasgos que caracteriza a este extraño periodo de transición que se vive en este Ayuntamiento y por extensión en esta Ciudad. No hay manera de abordar un debate estratégico. Lo que es peor, tenemos un plan estratégico del que nadie se acuerda. Parece que algunos viven mejor en la improvisación.

Y sin embargo, esas personas que con su iniciativa empujan  a esta Ciudad tienen muy clara la dirección. ¿Y por qué será a veces tan difícil ayudarles a empujar? Esa es la segunda cuestión que ha estado presente en todos nuestros encuentros, la del papel que debe jugar un Ayuntamiento a la hora de propiciar el desarrollo de  la actividad económica. No debería ser ni el de suplantar o acaparar (copiar o hacer lo que alguien por propia iniciativa ya está dispuesto a hacer), ni el de recelar, ni el de entorpecer o complicar. Y sin embargo, eso es lo que muchas veces quien tiene una iniciativa percibe de su Ayuntamiento. Complicados trámites burocráticos, interminables esperas, intentos de acaparar… Tenemos que empezar a conjugar nuevos verbos, tales como colaborar, facilitar, ayudar y resolver. Probablemente es  más complicado que conceder subvenciones, pero curiosamente eso es lo que ninguna de las personas con las que hemos estado nos han pedido. Precisamente, porque esto va de economía.

Euskararen erabilera politikoa

Ramón Labayen hil zenean, EAJ-PNVren Udal taldeak pentsatu zuen  Donostiako Alkate izandakoak gure Hiriaren txoko batetan oroitua izatea merezi zuela. Proposamena aurkezterakoan egin genuen lehen gauza familiarekin hitz egitea izan zen, ez genekielako bere abizena nola jarri behar ote genuen, alegia, Labaien edo Labayen. Familiak garbi esan zigun: “Aitak Labayen jartzen zuen beti, horrela nahi zuen”. Eta Plenoak horrela jartzea erabaki zuen: “Plaza Alcalde Ramón Labayen – Ramon Labayen Alkatea plaza”.

Adibide hau jartzen dut, gure kaleen euskarazko izenak zeintzuk izan behar duten erabakitzea ez dela gauza erraza adierazteko. Nik neuk zalantzak izan ditut Kontxaren kasuan, eta ez nago euskararen kontra, Alkateak gaur esan duen moduan.

Udal Gobernuak gure Hiriko ia 300 kaleren izenen euskarazko bertsioak onartzeko erabakia aurkeztu  zigun orain dela hiru aste. Beste gauza askorekin gertatu ohi den bezala, lehenik egunkarien bitartez izan genuen horren berri. Bilduk euskararen “txapa” jarri nahi zuen baina tira, horraino ez daukagu eragozpenik.

Donostiako zinegotzia eta euskaltzaina den Miren Azkaratek, gaiari ekin bezain pronto adierazi zidan gaia ez zela erraza izango, Gobernuak berak aurkeztutako proposamenean bertan irizpide kontrajarriak  zeudelako eta ezinbestekoa zelako kasuak banan bana eta zorrotz aztertzea. Horrelaxe adierazi genion Udal Gobernuari Irailaren 15ean ospatu genuen Udal Batzordean. Kezka hori adieraztearekin batera, hilabeteko epea eskatu genuen, lantaldea osatu eta Urriaren 30eko Plenoan erabakiak behar bezala hartzeko. Ezezko borobila jaso genuen eta ondorioz,  aurkezten zitzaigun proposamenaren aurrean abstenitu egin ginen, zuzenketak aurkeztuko genituela adieraziz.

Segituan konturatu nintzen Bilduk ez zuela kaleen euskarazko izenak nola idazten diren inguruko kezka handiegirik, gai hau politikoki erabiltzea zen bere asmo nagusia. Segituan hasi ziren Donostian ohikoak diren Bilduko bozeramaleak egurra ematen eta EAJ-PNV Donostiako kaleak euskaratzearen aurka zegoela esaten.

Batzordean gertatutakoaren ondoren, Miren Azkaratek egindako lan itzelari esker, gure Udal Taldeak 48 zuzenketa aurkeztea lortu zuen Iraiaren 19rako. Gobernu ardura duen Bildu taldeak berak 47 aurkeztu zituen! Egindako jatorrizko proposamenarekin Bilduk berak zalantza handiak zituenaren adierazgarri hoberik?

Behin eta berriro esan diogu Alkateari gaiak adostasuna kudeatzeko beharra zuela eta zuzenena Urriaren 30eko Plenora eramatea zela, aldez aurretik egin beharreko guztiak eginda. Horrela esan diogu Bozeramale batzordean, atzo bertan bere bulegoan eta gaur Plenoan. Baina erabakia hartuta zegoen, eta berriro agerian geratu da eztabaida ez dela gure kale izendegia modu txukunean itzultzeari buruzkoa. Plenoaren gehiengoak eskatutakoari muzin egin dio Alkateak, baina larriagoa dena, Plenoko Idazkariari hitza ukatu dio. Zergatik? Nire susmoa da Alkateak ezin zuela puntu hori mantendu Plenoaren gehiengoak bertan behera uztea eskatzen zuenean, baina Alkateak berak nahi zuena egin nahi zuen eta idazkariari hitz egitea debekatu dio. “Hemen nik agintzen dut!”. Ez da hau entzuten dugun lehen aldia.

Gai honen inguruan Bilduk egin nahi zuena berriro agerian geratu da. Eztabaida ez da gure kale izendegia modu txukunean itzultzeari buruzkoa. Euskara Bilduk bakarrik maite duela eta Bilduri bakarrik axola zaiola esatea baizik.

Alkateak berak prentsaurrekoan esan dituenak entzutera joan gara zenbait zinegotzi, azkenaldi honetan prentsaurrekoak baitira Udaletxe honetan esan nahi diguna esateko erabiltzen duen bidea. Han esan digu euskaren kontra gaudela. To! Nire aldamenean nuen euskaltzaina infiltratua ote Euskaltzaindian?

Tristea eta kaxkarra. Hori da jokabide honek merezi duen izena. Bilduk erabaki badu gai hau guri egurra emateko erabili behar duela, ba bejondeiola! (hau idazten dudan bitartean nire eskukoan ikusten ditudan twitterreko txioek hori adierazten didate).

Konsignetaz haratago, norbaiti interesatzen baldin bazaio Donostiako kale izendegia euskaraz eta gazteleraz behar bezala jartzea, utzi diezaiotela euskara tresna politiko gisa erabiltzeari eta ekin diezaiogun lanari.  Hori da zalantzarik gabe euskarari eta gure hiriari egin diezaiokegun mesederik handiena.